El RACC aconseja cómo conducir con la máxima seguridad por carreteras con hielo y nieve
Antes de iniciar el trayecto
- Comprobar el estado del vehículo y asegurar que se encuentra en condiciones óptimas.
- Prestar especial atención al estado de los neumáticos.
- Revisar el estado de la batería.
- Asegurar que se dispone de los elementos de seguridad necesarios en caso de avería. Una linterna, guantes, chaleco reflectante y triángulos y el deposito lleno de combustible antes de salir para garantizar el uso de la calefacción, asegurarnos de que disponemos de cadenas. También es recomendable tener una manta dentro del vehículo.
- Programar el GPS antes de iniciar el viaje y consultar el estado de las carreteras. El RACC ofrece información actualizada a través de la web infotransit.racc.cat y de la App “RACC Infotransit”.
Una vez circulando, es importante
- Adaptar la conducción a las condiciones de la vía y aumentar la distancia de seguridad.
- Realizar una conducción suave evitando maniobras bruscas. Para frenar reduzca primero la marcha y seguidamente pise el pedal de freno suavemente.
- Seguir el trazado de las marcas de los neumáticos de otros vehículos.
- Regular el uso que hacemos de la tecnología y evitar cualquier tipo de distracción.
- Colocar las cadenas. Únicamente cuando hay nieve en la carretera y nunca en asfalto seco. Una vez puestas, circular con precaución y a una velocidad que no debería superar los 40km/h.
Con el coche ya estacionado
- No forzar demasiado el freno de mano y dejar puesta una marcha.
- Levantar los limpiaparabrisas para evitar que el caucho se enganche al cristal.
- Para derretir el hielo del parabrisas es preferible activar la calefacción con en aire para desempañar el cristal o usar un espray descongelante.
- Sacar las cadenas. Es importante sacar las cadenas en cuanto se abandone el tramo de carretera nevado. Una vez retiradas, es necesario limpiarlas y secarlas completamente para alargar su vida útil.
Para más información: RACC Prensa: saladepremsa.racc.es