La prueba cumple este 2018 seis décadas de celebración ininterrumpida, en las que se ha convertido en uno de los referentes internacionales por su incomparable itinerario -en el que destacan sobremanera las Costas del Garraf-, la implicación de sus participantes y la complicidad de las ciudades que le dan nombre.
La 60ª edición del Rally Barcelona-Sitges es una de las más esperadas de los últimos tiempos. Una edición tan señalada como esta ha permitido que su reconocida capacidad de convocatoria se haya visto reforzada, motivo por el cual muchos aficionados y coleccionistas de coches de época no han querido dejar escapar la ocasión de volver a participar en la prueba.
Más de un centenar de vehículos tomarán la salida de la Plaza Sant Jaume de Barcelona, con sus ocupantes ataviados con ropas propias de la época en la que fueron construidos, y afrontarán la “carretera de las Costas” para llegar a Sitges, donde se espera que una multitud les reciba tanto en el Port de Sitges-Aiguadolç, tradicional parada de refresco, como en la Plaza de La Fragata, al pie de la Parroquia de Sant Bartomeu y Santa Tecla.
La exposición de L’illa Diagonal, un clásico
El centro comercial L’illa Diagonal de Barcelona es uno de los puntos de referencia del evento. Desde el 12 de febrero y hasta el sábado 3 de marzo, día de las verificaciones del Rally, se exponen seis modelos de época representativos de la caravana que podrá verse rodar al día siguiente.
En esta ocasión, la muestra la componen un Essex Super Six Doctor Coupé de 1929, un Le Zebre Type C – Cabriolet de 1915, un Flanders “20” Twenty Roadster, un Ford Modelo T de 1926, un Rolls-Royce Phantom I Mayfair y un Rolls-Royce Phantom I de 1927 “ex William Deering”. El mismo sábado, a partir de las 10:00, los vehículos inscritos acudirán a la Av. Diagonal, sobre la acera frente a L’illa Diagonal, donde permanecerán expuestos hasta las 17:00.