El BMW serie 5 es sin duda una de las berlinas que más me ha gustado desde siempre, estéticamente hablando, es deportiva, elegante y unas proporciones muy conseguidas, en cuanto a funcionamiento es un gran coche, aunque un servidor no es muy fan de los tracción trasera, así que si me tuviera que comprar uno optaría por los más eficaces y seguros Xdrive, o sea tracción total.
La versión que hoy nos ocupa es la más demandada de la gama, berlina (recordemos que también hay una carrocería Familiar) diesel y tracción trasera, un cocktel muy atractivo que comprendemos que agrade.
El coche es sencillamente una maravilla, a la altura de un Audi A6 pero con una estética más agresiva, en movimiento es suave, silencioso y aporta mucha seguridad, los múltiples sistemas de seguridad se encargan de mantener todo en su sitio y va perfecto lo llevemos por dónde lo llevemos.
En ciudad y a pesar de casi llegar a los 5 metros (en concreto 4,9) es un coche ágil y maniobrable, eso si, si la plaza de parking es pequeña no entrará ni con calzador. Estacionar es bastante sencillo, en nuestro caso con la inestimable ayuda de la cámara de visión trasera opcional que recomendamos.
En autopista es un tren de alta velocidad, silencioso, estable, rápido y muy cómodo, permite realizar todo tipo de viaje sin problema alguno.
En carreteras viradas y de segundo orden, si el asfalto está en buenas condiciones, sale a relucir el ADN BMW, con la posibilidad de realizar una conducción deportiva sin despeinarse.
El motor, best seller de la marca, es muy económico y brillante en prestaciones, los 184 caballos dan para mucho y la única pega que habíamos encontrado en otros modelos, que era el ruido, aquí no se percibe gracias a un trabajo de aislamiento soberbio.
El consumo se ha mantenido por debajo de los 6 litros en concreto 5,8 a los 100 kilómetros, una cifra muy destacable visto el pedazo de coche del que estamos hablando y que tampoco es cojo.
Las prestaciones son excelentes con una elevada punta de 234 Km/h y pasando de 0 a 100 Km/h en tan solo 8,1 segundos.
El cambio automático de 8 relaciones es imperceptible, selecciona siempre la marcha adecuada y enamora desde los primeros metros.
Dentro, el lujo de esta versión Luxury es destacable, con remates de piel, metales,.. el ambiente es cálido y se respira la calidad.
El salpicadero muy en la línea del resto de modelos de la marca bávara está muy bien rematado pero le falta algo de personalidad, la pantalla central es de mucha ayuda, aunque es complicado de cogerle el tranquillo rápido. El cuadro de relojes es completo y muy intuitivo, se lee con suma facilidad.
Las plazas delanteras son excepcionales, cómodas, fáciles de regular y con tamaño suficiente para albergar a cualquiera.
Detrás hay bastante espacio, pero no es de los mejores de entre sus competidores, el acceso es correcto y hay espacio para 2 adultos cómodamente, el túnel de transmisión central molestaría a un hipotético tercer ocupante.
El maletero nunca ha sido una de las virtudes de los BMW, pero sus 520 litros permite el acomodo de una buena cantidad de equipaje, bultos,..
Valoración Final El coche es sensacional por facilidad de conducción, belleza de líneas y calidad general. Su precio parte de 43.000 euros a lo que podemos sumar muchos extras y a lo que seguro que en nuestro concesionario de BMW nos harán algún descuentillo. Si os gusta y os llega el presupuesto, probadlo y os convencerá.
Cónocelo y pruébalo en los concesionarios BMW Barcelona Premium