El 15% de las ganancias derivadas de la venta de repuestos se generará gracias a Internet en 2025, según un estudio llevado a cabo por Frost & Sullivan, que además analiza cómo la tecnología y el comportamiento de los consumidores cambiará el modo en que los conductores comprarán los recambios para sus coches o eligen taller a medio plazo.
El comercio electrónico de piezas de recambio y accesorios va a vivir un auténtico “boom” en los próximos años, alcanzando un negocio de 20.000 millones de dólares en 2020 en el mundo, con una penetración de mercado del 10%.
La venta directa al usuario final también se convertirá en algo normal. Y ya hay ejemplos: el fabricante de componentes Bosch ha creado una tienda online en la página líder de comercio electrónico en China, TMall, con gran éxito en su primer año de vida. Muchos otros fabricantes están vendiendo sus repuestos directamente al dueño del coche, en una tendencia que será normal en los mercados emergentes, porque tienen un mercado de piezas de repuestos poco estructurado. Sin embargo, esto también llegará al mercado europeo y estadounidense. Empresas como Goodyear ya están vendiendo directamente a sus clientes, a través de portales donde el conductor adquiere las ruedas sin la participación de un intermediario.
En los próximos años, según el mismo estudio, se desencadenará una “guerra” entre los distribuidores tradicionales y los nuevos actores online, que ya han cogido parte del “pastel” de las ventas a usuarios finales, pero que también están luchando por captar la venta a profesionales del sector, como talleres o flotistas. Faconauto.