Las emisiones medias de los coches vendidos en España descendieron un 2,6% en 2015 respecto al ejercicio anterior, situándose en los 115,5 gramos de dióxido de carbono por kilómetro recorrido, indican la consultora MSI para la Federación de Asociaciones de Concesionarios de la Automoción (Faconauto).
La patronal considera que esta reducción se debe sobre todo a la influencia del Plan Pive, que ha seguido vigente a lo largo del todo el año y que incentiva la adquisición de vehículos eficientes. De hecho, desde su puesta en marcha, las emisiones medias de dióxido de carbono de los coches matriculados han caído un 10%.
Faconauto también recuerda que este buen dato se ha visto favorecido por el constante esfuerzo en desarrollos tecnológicos que están haciendo las marcas para acelerar estos recortes, así como por el cambio que ha sufrido el mercado nacional en los últimos años, en los que los compradores han optado por modelos más pequeños y eficientes.
Con estas cifras, España vuelve a situarse como uno de los países de la UE en los que se adquieren coches más eficientes, quedando, un año más, por debajo de la media europea que, según estimaciones de Faconauto, en 2015 fue de 120 gramos de dióxido de carbono por kilómetro recorrido, y por debajo del resto de mercados relevantes (Alemania, Reino Unido e Italia), a excepción de Francia.
“El Pive es la mejor herramienta que tenemos para acelerar la reducción de emisiones de dióxido de carbono, porque no sólo incentiva la compra de vehículos menos contaminantes, sino que también obliga al achatarramiento de coches que superan los diez años de edad, menos desarrollados tecnológicamente y, en consecuencia, responsables de más emisiones”, expresó el presidente de Faconauto, Jaume Roura.
En su opinión, los datos corroboran que estos planes están funcionando en lo referente a las emisiones, pero no hay que olvidar que son asimismo fundamentales para rebajar la edad media de nuestro parque.
Los planes de renovación del parque, claves para reducir las emisiones, especialmente en las grandes ciudades, deberían acompañarse, a juicio de Faconauto, de otras medidas que no pasaran forzosamente por la restricción del tráfico, sino por la potenciación del transporte público eficiente, de nuevos modelos de movilidad que optimicen el uso del vehículo, de combustibles alternativos o de la concienciación para una conducción más racional.