El fraude descubierto comenzó en la provincia de Valladolid, relata la versión digital de ‘El Norte de Castilla’, con la denuncia de un conductor que comprobó algo extraño en su vehículo. Lo había comprado de segunda mano, sí, pero los fallos que presentaba no le cuadraban en el tiempo.
Puesto en contacto con la Guardia Civil se descubrió una trama fraudulenta de compra venta de coches. Pero se siguió tirando del hilo y, tras seis meses de investigación por parte de la Comandancia y del grupo de investigación de Tráfico se ha logrado localizar a un concesionario que vendía vehículos tras falsear el kilometraje, reduciéndolo considerablemente
El delito de estafa y de falsedad documental consistía en que esta empresa compraba vehículos a bajo precio, relativamente nuevos, de pocos años y alto kilometraje, y a través de una aplicación informativa que conectaban reducían el kilometraje a los coches, que luego vendían a buen precio.
Fuente: El Norte de Castilla
