Ultra es el apellido ecológico de Audi, unos acabados que tienen casi la totalidad de la gama del fabricante de Ingolstadt, con varias soluciones que nos permitirán ahorrar algo de combustible. En este caso probamos al pequeño de la familia Ultra, al A1 como motor 1,4 Turbodiesel de 90 cv, un motor ya muy frugal que acentuá su economía con las soluciones integradas del paquete Ultra, que incluye un Start/Stop, un largo cambio de marchas de 5 vel. , neumáticos de baja fricción y varios aditamentos aerodinámicos para bajar la resistencia con el viento.
El motor es un tres cilindros de 1,4 litros que desarrolla la suficiente cifra de 90 caballos, no es muy rumoroso y aunque vibra no llega a molestar, su funcionamiento es bueno, pero pensamos que no está a la altura de lo esperado en un Audi, dónde siempre todo roza la excelencia.
El motor es algo perezoso, las prestaciones son correctas, con 182 Km/h de punta y 11,3 segundos en pasar de 0 a 100 Km/h, todo tipo de aceleración o recuperación obliga a usar el cambio, ya que sus desarrollos largos son muy buenos para hacer kilómetros por autopista, pero no ayudan en conducción normal.
Respecto al consumo, si hacemos carretera a ritmo estable, es un auténtico mechero, con cifras entorno a los 3,8 litros a los 100 kilómetros, pero en conducción normal por ciudad, autopista y carretera, a nosotros nos ha gastado 4,8, una cifra excelente pero que está lejos del consumo homologado y que a fin de cuentas es para los que la mayoría de sus compradores usarán el A1.
La dirección y los frenos son marca de la casa, excelentes por tacto y precisión.
El interior es pequeño como el de cualquiera de sus competidores (Clio, Fiesta, Ibiza, Polo,..) pero con un acabado y materiales mucho más cuidados y un confort algo mayor, sobretodo acústicamente hablando.
El salpicadero es funcional y está bien resuelto, pero no es ni moderno ni joven, aunque todo está en su sitio y es fácil de usar. Igual sucede con el cuadro de relojes, excelente lectura y disposición pero falto de vida.
Los asientos delanteros son muy buenos, vas sentado bastante cerca del suelo, pero el mullido y el confort es elevado.
El A1 es un 2+2, detrás caben 2 personas, si puede ser pequeñas mejor, las puertas traseras son pequeñas y por tanto el acceso justo, pero los asientos son confortables.
El maletero es pequeño, en línea con sus competidores, aquí no hay formulas mágicas, los 270 litros permiten un uso total si usamos la inteligencia, si necesitamos algo más de capacidad podemos reclinar los asientos traseros.
El comportamiento es muy bueno, falta algo de potencia para calificarlo de divertido, pero permite todo tipo de uso, es ágil y rápido en ciudad, se mueve bien en carretera si hacemos un uso intensivo del cambio y por autopista nos permite hacer miles de kilómetros con seguridad y con un elevado aplomo.
Valoración Final: El coche va bien pero para el uso normal de este tipo de urbanos, es más recomendable el motor 1,6 TDi i el 1.2 TSi en gasolina, sobretodo este último, que no se ve lastrado por un cambio tan largo. En cuanto al coche, el A1 es de lo mejor entre los coches de su tamaño, es más caro que la media, pero su valor de reventa y la calidad de materiales lo compensan con creces. En este caso el cheque será de entorno a 19.000 Euros, a lo que seguro podremos bajar algunos cientos si nos camelamos al comercial de turno.